y encima un circuito que habias dado mil vueltas y preparado que se te veia.... ainssss, por mi parte despues de rodar con los grandes un rato, incluso de apretar a xino mi hija se puso a vomitar (cosa bastante habitual) y me cego la pasion de padre, por cierto he de decir que la emocion y adrenalina son las mismas pero que la diferencia de velocidades que existe en posiciones mas retrasadas entre pilotos hace una conduccion mas divertida con mas adelantamientos y toquecitos. Los buenos parecen relojes y tienes que ir recortando decima a decima....no se yo si vale la pena....